Historias

La pandemia ha cambiado el día a día de millones de niños en el mundo, también el de Ada Mariela. Incluso en su aislada comunidad de Paucarcolla, las redes sociales y las plataformas digitales emergen para que niñas y niños sin recursos puedan seguir estudiando en momentos de confinamiento. En casa de Ada, están pasando dificultades a causa del coronavirus. “Mi papá trabajaba en construcción. Con ese dinero él traía carne, de pollo, res, cordero y las comidas eran más ricas. Ahora que no hay trabajo tenemos que comer lo que hay”. Aun así Ada deja un mensaje para que todas las personas tengan paciencia y pide que todos “se cuiden mucho”. Puedes ver el video desde aqui

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"Mi familia está formada por mi papá Wilber, mi mamá Marleny y mis dos hermanos varones, Erikson de 22 años y Johan de 19 años. Hace unas semanas llegaron mis primas a vivir con nosotras. Nos ayudan en las tareas y juegan conmigo.

"Me levanto a las 6:00 de la mañana para ayudar a mi mamá a preparar el desayuno, además de esto soy la encargada de dar de comer a los animales, a nuestro cerdo y seis ovejas, una vez acabada esa labor me siento a desayunar con mi familia".

"Me he registrado para hacer clases de “Aprendo en casa”, programa del Ministerio de Educación  Lo hago por Facebook y también adelanto el material que mi profesor me envía por WhatsApp. Tengo clase a las 10:00 y a las 16:30 usando la radio.

"Hago mis tareas y una vez terminadas se las envío a mi profesora mediante fotos que tomo con un móvil.  Pero es difícil para mí y mi familia tener acceso  a Internet ya que en la comunidad que vivimos no hay mucha cobertura de red"

"A mediodía ayudo a hacer el almuerzo, que por la pandemia no lleva muchos ingredientes. Cuando terminamos de almorzar los miembros de mi familia se dividen en dos equipos para disputar un partido de vóley. En la noche nos reunimos para la última comida del día, nos sentamos a cenar y luego a descansar".

"Esta enfermedad nos ha afectado mucho ya que mis papás no tienen trabajo y tampoco les tocó ningún bono solidario. Ya no saben de dónde sacar plata. La gente de mi comunidad está vendiendo su ganado. Ya tuvimos dos alertas en Paucarcolla de coronavirus, por eso quiero que todo el mundo se cuide mucho".